Diputados fueguinos siguen perdiendo el tiempo: ahora quieren declarar “persona no grata” al futuro embajador de EE.UU.

Diputados fueguinos vuelven al ridículo: ahora quieren declarar “persona no grata” al futuro embajador de EE.UU. mientras la crisis real no les import

En vez de proponer proyectos que le cambien la ecuación a la gente, los diputados y senadores fueguinos insisten en gastar tiempo y recursos en iniciativas absurdas: declarar a alguien “persona no grata”, pedir informes que nadie responde o bautizar fechas como de “interés”. Ahora, el turno es para Peter Lamelas, el futuro embajador de Estados Unidos en la Argentina, a quien el bloque de Unión por la Patria pretende rechazar por sus declaraciones sobre Cristina Fernández de Kirchner y la situación del país.

Sí, en medio de una economía devastada, pobreza creciente y servicios colapsados, los legisladores creen que el problema urgente es lo que opina un diplomático extranjero en una audiencia del Congreso estadounidense.

¿Qué dijo Lamelas que molestó tanto?

Durante su exposición ante el Comité de Relaciones Exteriores del Parlamento de EE.UU., Lamelas expresó que, de ser confirmado, se mantendría firme contra la influencia de “potencias adversarias” en América Latina, entre ellas China, Irán, Cuba, Venezuela y Nicaragua, y deslizó críticas sobre la corrupción y el deterioro institucional en la región. También hizo mención al caso AMIA y al proceso judicial que involucra a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner.

La respuesta de los diputados de UxP no se hizo esperar. A través de un proyecto de resolución encabezado por Germán Martínez, solicitaron que el Congreso lo declare “persona no grata” en “resguardo de la soberanía, la dignidad y los intereses de la República”.

Legisladores fueguinos: expertos en declaraciones inútiles

Más allá del contenido del reclamo, lo que queda claro es el paupérrimo nivel de representación que exhiben nuestros diputados y senadores, particularmente los fueguinos. Lejos de ocuparse de los problemas reales de Tierra del Fuego, dedican su tiempo a temas que no alteran un ápice la realidad de sus votantes.

¿Algún proyecto concreto para la generación de empleo? ¿Alguna ley que mejore el sistema de salud en la provincia? ¿Iniciativas para solucionar la crisis energética o el colapso del transporte público? Cero. Nada. Sólo gestos simbólicos que no sirven para nada.

La ciudadanía se pregunta: ¿para qué sirven nuestros representantes si no representan más que sus propios intereses partidarios o sus vendettas ideológicas?

Un Congreso desconectado de la realidad

Mientras la inflación pulveriza los ingresos, las tarifas suben sin freno y los servicios públicos están en emergencia, los diputados están más preocupados por lo que dice un embajador que por lo que sufre su gente. Y es así como la política se hunde en su propia desconexión, dejando a los ciudadanos solos ante el ajuste y el abandono.