Al Sr . Fiscal de Estado De la Provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur S/D Manuel Raimbault , legislador de la ...
Al Sr. Fiscal de Estado
De la Provincia de Tierra del Fuego,
Antártida e Islas del Atlántico Sur
S/D
Manuel Raimbault, legislador de la Provincia de Tierra del Fuego y vecino de esta ciudad, domiciliado realmente en calle Quinquela Martín 1840 de la ciudad de Ushuaia y constituyendo el legal en mi público despacho, sito en calle San Martín nº 1435 de esta ciudad, en el doble carácter invocado, ante Ud. Me presento y digo: I.-
Que, vengo por el presente a solicitar su intervención a los efectos de que proceda a efectuar el pertinente control de legalidad sobre el proyecto sancionado en fecha 22 de diciembre de 2006, referido a las dietas del Gobernador y demás funcionarios políticos, cuyo texto adjunto, solicitando desde ya se inicien las acciones legales, de conformidad con lo establecido en los arts. 1º inciso e) y cctes de la ley provincial nº 3, tendientes a obtener la declaración de inconstitucionalidad de las normas cuestionadas y, en su consecuencia, se ordene la devolución de las sumas percibidas en más en forma ilegal, por inconstitucionalidad, por parte de la totalidad de los funcionarios beneficiados por dicha norma. A los efectos de evitar perjuicios innecesarios, solicito al Sr. Fiscal peticione una medida cautelar de no innovar en forma previa a que la primera percepción de salarios en que se aplique la norma cuestionada.
Lo expuesto en razón de los argumentos que a continuación expongo.
II.-
1.- Que, a la fecha, no he tenido a la vista el Decreto de promulgación del texto cuya observación se solicita.
Sin embargo, en el día de la fecha (jueves 4 de Enero de 2007) el Sr. Vice Gobernador a cargo del Ejecutivo, en un programa radial ha admitido que promulgó el texto en cuestión.
En cualquier caso, de no ser esto así, el control podrá hacerse en forma previa a la promulgación, de conformidad con lo establecido por el art. 7 inciso h) de la ley provincial nº 3, aconsejando se adopten las medidas que sean menester.
2.- Que, como ha sido reiteradamente señalado, las dietas de los funcionarios políticos, desde hace un tiempo han sido vivenciadas por nuestra comunidad como uno de los elementos de irritabilidad social más visibles.
Personalmente entiendo que esta crítica social generalizada no tiene que ver con el monto en sí de las remuneraciones de los funcionarios políticos, sino con la distancia, enorme, por cierto, entre la dirigencia y su pueblo. No es el sueldo en sí, sino la creencia de que no nos merecemos ni lo que ganamos (menos un aumento), lo que en verdad se impone. O en otras palabras, no es la cuantía, sino el mérito, lo que está en debate en nuestra comunidad. Y las razones son muy profundas. La terrible crisis de legitimidad que atravesamos, es en nuestra opinión, una de las perspectivas que cualquier dirigente político o funcionario público tendría que analizar al valorar estas cuestiones. En definitiva, desde una perspectiva estrictamente política, entendemos que en razón de la cada vez más profunda crisis política que atravesamos, el aumento de las dietas acentuará el enorme problema de legitimidad social que padecemos.
3.- Más la cuestión no sólo debe abordarse desde una perspectiva de legitimidad política exclusivamente, sino también desde una perspectiva legal y constitucional. Y este es, en definitiva, el ángulo desde el cual solicitamos la intervención del Sr. Fiscal de Estado. Por cierto, las miradas no serán independientes sino de influencia recíproca: la ilegitimidad será total, si además de la crisis sobre el mérito, existiera una objeción legal.En otras palabras: el poder político estará transitando un margen irreversible si, además de no superar su crisis de legitimidad, se fija salarios ilegales.
3.1.- Y decimos esto por cuanto, el aumento de dietas dispuesto en la sesión del 22 de Diciembre de 2006, resulta –en nuestra opinión- manifiestamente contrario a los arts. 95 y 134 de la Constitución de Tierra del Fuego.
3.2.- Que, tal como lo establece el art. 95 de la C:P.T.D.F., “Los Legisladores gozarán de la dieta que fije la ley, la cual no podrá ser alterada durante el período de sus mandatos, salvo cuando la modificación fuere dispuesta con carácter general”.En el mismo sentido, el art. 134 de la C.P.T.D.F. establece que “El Gobernador y el Vice Gobernador percibirán un sueldo a cargo del Tesoro Provincial, que será fijado por ley y no podrá ser alterado durante el período de su mandato, salvo cuando la modificación fuere dispuesta con carácter general”. Observe que la letra constitucional es clara: “la modificación”; la dispuesta, no otra (anterior o posterior), sino esa..
3.3.- De las normas transcriptas se desprenden, claramente, dos cuestiones principales: 1º).- que las dietas no pueden ser alteradas durante el período del mandato y; 2º).- que esa prohibición constitucional cede cuando la modificación fuere dispuesta con carácter general.
Como Ud. lo observará sin mayor esfuerzo, ninguna de las condiciones constitucionales se ha cumplido en el caso.En lo que a la primera condición respecta, conforme lo establece el art. 1º, la nueva dieta es fijada, “a partir del 1 de enero de 2007”; es decir, resulta manifiestamente contraria al principio constitucional de no alteración durante el período de mandato.Así las cosas, lo que entonces tendría que haber sucedido, a los efectos de superar la prohibición constitucional, es cumplir con la excepción que la misma carta magna prevé, esto es, que la modificación fuere dispuesta con carácter general. Lo que tampoco ha sucedido.
3.4.- Es cierto que, desde hace años la dieta de los funcionarios permaneció inalterada, y durante tiempo incluso reducida. También lo es que lo mismo le sucedió a los trabajadores del estado en sus remuneraciones. Es cierto que los trabajadores empezaron a recomponer, de a poco, sus salarios durante el año 2004. También lo es que, sin modificar la ley de dietas, en el período 1999-2003 la legislatura se autoimpuso un límite, reduciéndose las dietas a $ 4.500 por medio de una resolución, que dejó sin efecto a partir del año 2.003.Es decir, porcentualmente, la recuperación fue pareja. De allí que tampoco puede sostenerse que la nueva dieta acompaña una mejora análoga de carácter general a toda la administración, ya operada. Así, resulta claramente inconstitucional aún analizada desde el punto de vista de la equidad.
3.5.- A más de ello, los argumentos empleados en el proyecto, más que favorecer, acentúan la objeción constitucional. Según se señala en los fundamentos del proyecto votado, “… con el transcurso del tiempo han ido cambiando las circunstancias que concurren a la formación de los salarios en el sector público y aquel concepto denominado “aumentos de carácter general” a quedado en desuso …” (de los fundamentos escritos del proyecto presentado en sesión, cuya copia se adjunta). Como podrá concluirse sin mayores esfuerzos interpretativos, no será causal de abrogación de la constitución la falta reiterada de su cumplimiento, ni menos aún la práctica reiterada de su incumplimiento.Estas manifestaciones, por el contrario, son demostrativas del grado de anomia generalizado que caracteriza a la corrupción estructural.
Por ello es que, desde esta perspectiva, el mayor desafío será no seguir buscando argumentaciones disparatadas, sino más bien –de una vez y para siempre- elegir el cabal cumplimiento de la constitución.
3.6.- Lo que está sucediendo, parece claro, es una grosera manifestación de anomia institucional. Existe una norma, pero el Estado funciona como sino existiera tal normativa.
Es decir, se observa una distorsión entre la vigencia de la norma y su aplicación a la realidad. Y esto nos lleva a una cuestión varias veces debatida: no existe una cultura de la juridicidad.
Lo notable en nuestro proceso institucional es el contraste. Mientras en términos generales se avanza hacia normativas que ponen el acento en la transparencia y el control, las normas infraconstitucionales y la práctica administrativa e institucional, permanentemente la niegan.
Esta cuestión fue bien reflejada en un fallo del Superior Tribunal de Justicia de la Provincia de Tierra del Fuego, al expresar que: “Para reafirmar un modelo económico se necesita cumplir con la Constitución más que modificarla. En un magnífico libro, “Un país al margen de la ley”, Nino sostiene que nuestro subdesarrollo como Nación se explica en gran medida por el elevado grado de “anomia” o de incumplimiento de las normas, tanto jurídicas como convencionales, que se observa en nuestra sociedad y que se registra en conductas tales como el incumplimiento de las reglas de tránsito, la evasión impositiva, la obtención de un certificado médico para ausentarse del trabajo, etc. Los incumplimientos al orden jurídico se registran tanto por parte de los ciudadanos como del Estado y reconocen profundas raíces históricas como culturales.
Los virreyes del Río de la Plata recibían cédulas reales con la célebre frase “se acata pero no se cumple” y en la obra más representativa de nuestra literatura gauchesca, el Martín Fierro, el viejo Vizcacha manifiesta serias dudas sobre la imparcialidad de la ley, legisladores y jueces, incitando claramente a su desobediencia. Esta cultura de la “viveza criolla” lleva en el campo de la ciudadanía a ingeniosas maniobras para eludir la ley, y a los poderes públicos a intrincadas medidas para hacer cumplir sus objetivos, también al margen de la ley. Desde este punto de vista, la corrupción no es sino una manifestación de la anomia”.
Esta tolerancia cultural trajo consigo una especie de inversión axiológica, bien explicada por Nino al desentrañar el sentido del concepto.
“Viveza Criolla”. Algunos autores han apuntado concretamente a estas causas para empezar a evaluar el tema de la corrupción. En este sentido se ha dicho que “... cuando en una sociedad los valores que se admiran son la audacia, la viveza, la riqueza fácil, a la gente honesta y trabajadora comienza a apreciárseles como tontos, quijotes e ilusos; incluso se les acusa por sus familiares y amigos de que no saben aprovechar oportunidades. Igualmente, la complicidad social con los deshonestos, la solidaridad mal entendida con los compañeros de partidos y, en general, la impunidad de los corruptos es lo peor que está ocurriendo en nuestros países latinoamericanos”. Lo que parece empezar a revertirse es la concepción cultural, esto es, el grado de tolerancia hacia la producción de los mismos. Por ello es que se ha dicho que “la corrupción es un comportamiento antiguo, hace mucho tiempo ilegal, pero objeto de una práctica tolerada en las altas esferas y por la opinión pública.
Hemos entrado actualmente a un período en donde este comportamiento, antes tolerado, ya no lo es”.
Uno de los factores principales que deben acentuarse para salir de esta suerte de anomia institucional generalizada, en mi parecer, consiste en comenzar a acortar diferencias entre el conjunto de normativas actualmente en vigencia, y su efectivo cumplimiento.
Que la Constitución esté para ser cumplidas tiene que ser algo más concreto que una simple aspiración. Para ello también será necesaria una profunda transformación institucional, de manera tal que no se produzca esta eterna disociación entre “el conjunto de normas formalmente vigentes” y “la convivencia de la comunidad y el sistema institucional de conformidad al mismo”.
La reversión cultural en orden a estas cuestiones resulta determinante a los efectos de comprender en su real dimensión el correcto posicionamiento que cada ciudadano, funcionario o magistrado debe tener en orden a la conducta que el derecho espera.
Esto resulta imprescindible para que la aspiración colectiva empiece a transformarse en una realidad.
De lo contrario entraremos, como hasta entonces, estaríamos legitimando y dándole continuidad a lo que con mucha sabiduría ha denominado Gordillo como la “Administración Paralela”.
Resulta imprescindible, y tiene esto un sesgo cultural inevitable, recortar las diferencias que existen entre las normas vigentes y el funcionamiento real del estado.
Esto es lo que sucede en el caso.
Existe una norma constitucional, de profundo contenido ético, pero el estado funciona como si no existiera tal norma. La diferencia es la preponderancia de la anomia sobre el derecho. En definitiva, cuando se tratan este tipo de cuestiones se observa que, después de procesos autoritarios y corruptos, lo que en verdad ha emergido es un sistema dual: al mismo tiempo en que se ensanchan las garantías constitucionales y supraconstitucionales, se observa un ordenamiento infraconstitucional que las niega.
Como lo señalara Lorenzetti, actual ministro de la C.S.J.N., en algún punto debemos preguntarnos si no hemos “tropicalizado” nuestras instituciones.
La “tropicalización” de nuestras instituciones no es sino advertir, como mucho antes lo hiciera Carlos Nino (“Un país al margen de la ley”), que nuestro subdesarrollo también se extiende a nuestras prácticas institucionales, y no es simplemente económico. El subdesarrollo del que habla Nino, tiene mucho que ver con las distancias existentes entre lo que debería ser y lo que efectivamente es. El caso en análisis es un ejemplo brutal de ello.
3.7.- Como vé, Sr. Fiscal, desde la perspectiva legal y constitucional, también puede advertirse la agudización de la crisis política actual.Nos encontramos en una crisis institucional sin precedentes que es, fundamentalmente, una crisis de legitimidad. Aumentarse las dietas profundizando un proceso de anomia y corrupción estructural, es agigantar las distancias con nuestro pueblo. Y no hay margen para ello.
4.- Se acompaña copia del proyecto presentado por el Legislador Bericua en la sesión del 22 de diciembre del año 2006, y copia del sancionado y elevado al ejecutivo.
5.- Se deja expresa constancia que, para el supuesto de que, previo a la percepción del primer pago con aplicación de la ley cuestionada no se hubiere dictado y/o solicitado medida cautelar alguna, depositaré en cuenta separada la diferencia entre lo que actualmente percibo y lo que percibiré por aplicación de la nueva ley, poniendo a disposición de este organismo de control, a las resultas de lo solicitado en el presente.
6.- Por lo expuesto solicito:
1).- Por presentado;
2).- Oportunamente se haga lugar a lo solicitado, en todas sus partes.
Sin otro particular, saludo a Ud. Atentamente.
De la Provincia de Tierra del Fuego,
Antártida e Islas del Atlántico Sur
S/D
Manuel Raimbault, legislador de la Provincia de Tierra del Fuego y vecino de esta ciudad, domiciliado realmente en calle Quinquela Martín 1840 de la ciudad de Ushuaia y constituyendo el legal en mi público despacho, sito en calle San Martín nº 1435 de esta ciudad, en el doble carácter invocado, ante Ud. Me presento y digo: I.-
Que, vengo por el presente a solicitar su intervención a los efectos de que proceda a efectuar el pertinente control de legalidad sobre el proyecto sancionado en fecha 22 de diciembre de 2006, referido a las dietas del Gobernador y demás funcionarios políticos, cuyo texto adjunto, solicitando desde ya se inicien las acciones legales, de conformidad con lo establecido en los arts. 1º inciso e) y cctes de la ley provincial nº 3, tendientes a obtener la declaración de inconstitucionalidad de las normas cuestionadas y, en su consecuencia, se ordene la devolución de las sumas percibidas en más en forma ilegal, por inconstitucionalidad, por parte de la totalidad de los funcionarios beneficiados por dicha norma. A los efectos de evitar perjuicios innecesarios, solicito al Sr. Fiscal peticione una medida cautelar de no innovar en forma previa a que la primera percepción de salarios en que se aplique la norma cuestionada.
Lo expuesto en razón de los argumentos que a continuación expongo.
II.-
1.- Que, a la fecha, no he tenido a la vista el Decreto de promulgación del texto cuya observación se solicita.
Sin embargo, en el día de la fecha (jueves 4 de Enero de 2007) el Sr. Vice Gobernador a cargo del Ejecutivo, en un programa radial ha admitido que promulgó el texto en cuestión.
En cualquier caso, de no ser esto así, el control podrá hacerse en forma previa a la promulgación, de conformidad con lo establecido por el art. 7 inciso h) de la ley provincial nº 3, aconsejando se adopten las medidas que sean menester.
2.- Que, como ha sido reiteradamente señalado, las dietas de los funcionarios políticos, desde hace un tiempo han sido vivenciadas por nuestra comunidad como uno de los elementos de irritabilidad social más visibles.
Personalmente entiendo que esta crítica social generalizada no tiene que ver con el monto en sí de las remuneraciones de los funcionarios políticos, sino con la distancia, enorme, por cierto, entre la dirigencia y su pueblo. No es el sueldo en sí, sino la creencia de que no nos merecemos ni lo que ganamos (menos un aumento), lo que en verdad se impone. O en otras palabras, no es la cuantía, sino el mérito, lo que está en debate en nuestra comunidad. Y las razones son muy profundas. La terrible crisis de legitimidad que atravesamos, es en nuestra opinión, una de las perspectivas que cualquier dirigente político o funcionario público tendría que analizar al valorar estas cuestiones. En definitiva, desde una perspectiva estrictamente política, entendemos que en razón de la cada vez más profunda crisis política que atravesamos, el aumento de las dietas acentuará el enorme problema de legitimidad social que padecemos.
3.- Más la cuestión no sólo debe abordarse desde una perspectiva de legitimidad política exclusivamente, sino también desde una perspectiva legal y constitucional. Y este es, en definitiva, el ángulo desde el cual solicitamos la intervención del Sr. Fiscal de Estado. Por cierto, las miradas no serán independientes sino de influencia recíproca: la ilegitimidad será total, si además de la crisis sobre el mérito, existiera una objeción legal.En otras palabras: el poder político estará transitando un margen irreversible si, además de no superar su crisis de legitimidad, se fija salarios ilegales.
3.1.- Y decimos esto por cuanto, el aumento de dietas dispuesto en la sesión del 22 de Diciembre de 2006, resulta –en nuestra opinión- manifiestamente contrario a los arts. 95 y 134 de la Constitución de Tierra del Fuego.
3.2.- Que, tal como lo establece el art. 95 de la C:P.T.D.F., “Los Legisladores gozarán de la dieta que fije la ley, la cual no podrá ser alterada durante el período de sus mandatos, salvo cuando la modificación fuere dispuesta con carácter general”.En el mismo sentido, el art. 134 de la C.P.T.D.F. establece que “El Gobernador y el Vice Gobernador percibirán un sueldo a cargo del Tesoro Provincial, que será fijado por ley y no podrá ser alterado durante el período de su mandato, salvo cuando la modificación fuere dispuesta con carácter general”. Observe que la letra constitucional es clara: “la modificación”; la dispuesta, no otra (anterior o posterior), sino esa..
3.3.- De las normas transcriptas se desprenden, claramente, dos cuestiones principales: 1º).- que las dietas no pueden ser alteradas durante el período del mandato y; 2º).- que esa prohibición constitucional cede cuando la modificación fuere dispuesta con carácter general.
Como Ud. lo observará sin mayor esfuerzo, ninguna de las condiciones constitucionales se ha cumplido en el caso.En lo que a la primera condición respecta, conforme lo establece el art. 1º, la nueva dieta es fijada, “a partir del 1 de enero de 2007”; es decir, resulta manifiestamente contraria al principio constitucional de no alteración durante el período de mandato.Así las cosas, lo que entonces tendría que haber sucedido, a los efectos de superar la prohibición constitucional, es cumplir con la excepción que la misma carta magna prevé, esto es, que la modificación fuere dispuesta con carácter general. Lo que tampoco ha sucedido.
3.4.- Es cierto que, desde hace años la dieta de los funcionarios permaneció inalterada, y durante tiempo incluso reducida. También lo es que lo mismo le sucedió a los trabajadores del estado en sus remuneraciones. Es cierto que los trabajadores empezaron a recomponer, de a poco, sus salarios durante el año 2004. También lo es que, sin modificar la ley de dietas, en el período 1999-2003 la legislatura se autoimpuso un límite, reduciéndose las dietas a $ 4.500 por medio de una resolución, que dejó sin efecto a partir del año 2.003.Es decir, porcentualmente, la recuperación fue pareja. De allí que tampoco puede sostenerse que la nueva dieta acompaña una mejora análoga de carácter general a toda la administración, ya operada. Así, resulta claramente inconstitucional aún analizada desde el punto de vista de la equidad.
3.5.- A más de ello, los argumentos empleados en el proyecto, más que favorecer, acentúan la objeción constitucional. Según se señala en los fundamentos del proyecto votado, “… con el transcurso del tiempo han ido cambiando las circunstancias que concurren a la formación de los salarios en el sector público y aquel concepto denominado “aumentos de carácter general” a quedado en desuso …” (de los fundamentos escritos del proyecto presentado en sesión, cuya copia se adjunta). Como podrá concluirse sin mayores esfuerzos interpretativos, no será causal de abrogación de la constitución la falta reiterada de su cumplimiento, ni menos aún la práctica reiterada de su incumplimiento.Estas manifestaciones, por el contrario, son demostrativas del grado de anomia generalizado que caracteriza a la corrupción estructural.
Por ello es que, desde esta perspectiva, el mayor desafío será no seguir buscando argumentaciones disparatadas, sino más bien –de una vez y para siempre- elegir el cabal cumplimiento de la constitución.
3.6.- Lo que está sucediendo, parece claro, es una grosera manifestación de anomia institucional. Existe una norma, pero el Estado funciona como sino existiera tal normativa.
Es decir, se observa una distorsión entre la vigencia de la norma y su aplicación a la realidad. Y esto nos lleva a una cuestión varias veces debatida: no existe una cultura de la juridicidad.
Lo notable en nuestro proceso institucional es el contraste. Mientras en términos generales se avanza hacia normativas que ponen el acento en la transparencia y el control, las normas infraconstitucionales y la práctica administrativa e institucional, permanentemente la niegan.
Esta cuestión fue bien reflejada en un fallo del Superior Tribunal de Justicia de la Provincia de Tierra del Fuego, al expresar que: “Para reafirmar un modelo económico se necesita cumplir con la Constitución más que modificarla. En un magnífico libro, “Un país al margen de la ley”, Nino sostiene que nuestro subdesarrollo como Nación se explica en gran medida por el elevado grado de “anomia” o de incumplimiento de las normas, tanto jurídicas como convencionales, que se observa en nuestra sociedad y que se registra en conductas tales como el incumplimiento de las reglas de tránsito, la evasión impositiva, la obtención de un certificado médico para ausentarse del trabajo, etc. Los incumplimientos al orden jurídico se registran tanto por parte de los ciudadanos como del Estado y reconocen profundas raíces históricas como culturales.
Los virreyes del Río de la Plata recibían cédulas reales con la célebre frase “se acata pero no se cumple” y en la obra más representativa de nuestra literatura gauchesca, el Martín Fierro, el viejo Vizcacha manifiesta serias dudas sobre la imparcialidad de la ley, legisladores y jueces, incitando claramente a su desobediencia. Esta cultura de la “viveza criolla” lleva en el campo de la ciudadanía a ingeniosas maniobras para eludir la ley, y a los poderes públicos a intrincadas medidas para hacer cumplir sus objetivos, también al margen de la ley. Desde este punto de vista, la corrupción no es sino una manifestación de la anomia”.
Esta tolerancia cultural trajo consigo una especie de inversión axiológica, bien explicada por Nino al desentrañar el sentido del concepto.
“Viveza Criolla”. Algunos autores han apuntado concretamente a estas causas para empezar a evaluar el tema de la corrupción. En este sentido se ha dicho que “... cuando en una sociedad los valores que se admiran son la audacia, la viveza, la riqueza fácil, a la gente honesta y trabajadora comienza a apreciárseles como tontos, quijotes e ilusos; incluso se les acusa por sus familiares y amigos de que no saben aprovechar oportunidades. Igualmente, la complicidad social con los deshonestos, la solidaridad mal entendida con los compañeros de partidos y, en general, la impunidad de los corruptos es lo peor que está ocurriendo en nuestros países latinoamericanos”. Lo que parece empezar a revertirse es la concepción cultural, esto es, el grado de tolerancia hacia la producción de los mismos. Por ello es que se ha dicho que “la corrupción es un comportamiento antiguo, hace mucho tiempo ilegal, pero objeto de una práctica tolerada en las altas esferas y por la opinión pública.
Hemos entrado actualmente a un período en donde este comportamiento, antes tolerado, ya no lo es”.
Uno de los factores principales que deben acentuarse para salir de esta suerte de anomia institucional generalizada, en mi parecer, consiste en comenzar a acortar diferencias entre el conjunto de normativas actualmente en vigencia, y su efectivo cumplimiento.
Que la Constitución esté para ser cumplidas tiene que ser algo más concreto que una simple aspiración. Para ello también será necesaria una profunda transformación institucional, de manera tal que no se produzca esta eterna disociación entre “el conjunto de normas formalmente vigentes” y “la convivencia de la comunidad y el sistema institucional de conformidad al mismo”.
La reversión cultural en orden a estas cuestiones resulta determinante a los efectos de comprender en su real dimensión el correcto posicionamiento que cada ciudadano, funcionario o magistrado debe tener en orden a la conducta que el derecho espera.
Esto resulta imprescindible para que la aspiración colectiva empiece a transformarse en una realidad.
De lo contrario entraremos, como hasta entonces, estaríamos legitimando y dándole continuidad a lo que con mucha sabiduría ha denominado Gordillo como la “Administración Paralela”.
Resulta imprescindible, y tiene esto un sesgo cultural inevitable, recortar las diferencias que existen entre las normas vigentes y el funcionamiento real del estado.
Esto es lo que sucede en el caso.
Existe una norma constitucional, de profundo contenido ético, pero el estado funciona como si no existiera tal norma. La diferencia es la preponderancia de la anomia sobre el derecho. En definitiva, cuando se tratan este tipo de cuestiones se observa que, después de procesos autoritarios y corruptos, lo que en verdad ha emergido es un sistema dual: al mismo tiempo en que se ensanchan las garantías constitucionales y supraconstitucionales, se observa un ordenamiento infraconstitucional que las niega.
Como lo señalara Lorenzetti, actual ministro de la C.S.J.N., en algún punto debemos preguntarnos si no hemos “tropicalizado” nuestras instituciones.
La “tropicalización” de nuestras instituciones no es sino advertir, como mucho antes lo hiciera Carlos Nino (“Un país al margen de la ley”), que nuestro subdesarrollo también se extiende a nuestras prácticas institucionales, y no es simplemente económico. El subdesarrollo del que habla Nino, tiene mucho que ver con las distancias existentes entre lo que debería ser y lo que efectivamente es. El caso en análisis es un ejemplo brutal de ello.
3.7.- Como vé, Sr. Fiscal, desde la perspectiva legal y constitucional, también puede advertirse la agudización de la crisis política actual.Nos encontramos en una crisis institucional sin precedentes que es, fundamentalmente, una crisis de legitimidad. Aumentarse las dietas profundizando un proceso de anomia y corrupción estructural, es agigantar las distancias con nuestro pueblo. Y no hay margen para ello.
4.- Se acompaña copia del proyecto presentado por el Legislador Bericua en la sesión del 22 de diciembre del año 2006, y copia del sancionado y elevado al ejecutivo.
5.- Se deja expresa constancia que, para el supuesto de que, previo a la percepción del primer pago con aplicación de la ley cuestionada no se hubiere dictado y/o solicitado medida cautelar alguna, depositaré en cuenta separada la diferencia entre lo que actualmente percibo y lo que percibiré por aplicación de la nueva ley, poniendo a disposición de este organismo de control, a las resultas de lo solicitado en el presente.
6.- Por lo expuesto solicito:
1).- Por presentado;
2).- Oportunamente se haga lugar a lo solicitado, en todas sus partes.
Sin otro particular, saludo a Ud. Atentamente.
BIEN POR MANUEL CAPAZ QUE ALGUIEN DE LA JUSTICIA LEA ATTE SU PEDIDO ,Y HAGAN LUGAR A ESTE PEDIDO TALVEZ ALGUN ILUMINADO HAGA LO QUE TENGA HACER.ESTA GENTE EN UNCO VERBO QUE SABE CONJUGAR ES:YO ROBO,TU ROBAS ,ELLOS ROBAN,NOSOTROS NO ROBABAMOS,ELLOS ROBANNNNN
ResponderBorrarMe llamó la atención que nadie (partidos políticos y/o gremios) haya expresado su desacuerdo y consiguiebte indignación por el ilegal aumento autootorgado.
ResponderBorrarAl fin alguien....
GRANDE RAIMBAULT!!!!
muy BIEN POR ESTE LEGISLADOR, AHORA ME PREGUNTO ÉL ESTA TRABAJANDO CON CHISPITA FADUL ? PORQUE ELLA EN EL PROGRAMA DE AYER DIJO QUE LA LEY ERA INCONSTITUCIONAL Y QUE IBA A PRESENTARSE EN LA JUSTICIA DESPUES DE QUE NO LE DIERON BOLA A LAS 4.000 FIRMAS. VAN JUNTOS EN ESTA? EL ARI TAMBIEN VA A ACOMPAÑAR AL FEDERAL FUEGUINO EN LA PRESENTACION DE UNA INICIATIVA POPULAR PARA CREAR RENASE COMO SOCIEDAD DEL ESTADO?
ResponderBorrarNo se dejen engañar estos legisladores son todos iguales gritan en el campo ajeno para que le descruban los huevos de su nidada y viniendo al caso el tema porque no presentan un recurso de inscontitucionalidad que esta reglado en el codigo civil y penal de pcia para mi mas de lo mismooooooooo
ResponderBorrarenano de mierda sos igual a jano delariva un denunciador compulsivo,parece que es la forma de operar de ese partido de mierda llamado ARI.denuncian como lo hizo la chancha carrio con las cajas de ee.uu.arman quilombo mediatico y nunca prosesan a nadie,denuncia a tu socio PORTEL por dejar vaciar el puerto,y por ser igual a sciuto "C O I M E R O",BASTA de denuncias sin sustento o sos como tu candidato BAZANETTI que como fiscal no hizo prosesar al acesino de trabuchi,no hizo nada con la modificacion a las tachas,ustedes son todos iguales
ResponderBorrarche, raimbault, hijo de un juez de la dictadura... a ver para cuando anuncias tu renuncia a cobrar los 13.500 de dieta... queremos ver cómo todos los meses donas esa plata y a quien, con comprobantes, no como la corrputa de de maria. Es muy facil salir a protestar por los medios del ARI (Botella, p23, cronicas) pero te quiero ver donando el aumento, caradura, charlatan de cafe, inservible, solo para hacer quilombo mediatico servis, para nada mas, nunca un proyecto, nunca una ley, nunca una accion para el pueblo... los que te votamos ahora vamos a votar a la chispa, que espero que labure, no como vs
ResponderBorrarESPERO QUE CUANDO LES VENGA EL AUMENTO EN EL SUELDO DIGA PUBLICAMENTE DONDE VA A DEPOSITAR LO QUE COBRE DEMAS PORQUE ESTOS SIEMPRE DENUNCIAN PERO IGUAL SE HACEN LOS GILES Y COBRAN SINO PREGUNTEN A LA HONESTA DE VERONICA DEMARIA QUE COBRABA EL DESARRAIGO Y NO VENIA A USHUAIA NI A TOMAR UN CAFE PERO IGUAL SE HACE LA ETICA PARA LA GILADA ANDAAAAAA!!!!!!!!!
ResponderBorrarAguante Manuel Raimbault!!!
ResponderBorrarSiempre que alguien alza la voz contra el poder sufre las consecuencias de los obsecuentes del poder... No importa, que nadie acalle las voces, por más que se los tilde de "denunciadores compulsivos" (argumento que se usa cuando no se tiene otro argumento para desacreditar a alguien).
Con respecto a quien escribió el mensaje refiriéndose a las donaciones, le sugiero que se informe mejor porque los dos legisladores de ARI vienen haciendo donaciones y rendiciones de cuentas desde que asumieron (dudo que algún otro funcionario o legislador los imite). Y si no creen lo que ven, ya es problema de quien lee. Las acciones son la evidencia.
Por una provincia más justa, menos corrupta y más honesta, ¡aguante Raimbault!
Dudo que trabaje con Fadul, simplemente porque Raimbault tiene sentido común, el menos común de los sentidos que hoy prima.
ResponderBorrarAl que dice que Raimbault nunca presentó un proyecto de ley, le digo que, lamentablemente por tener una ciudadanía poco interesada en las cuestiones cívicas, es que estamos como estamos. Al menos infórmense...
ResponderBorrarque manga de carlitos los que defienden al homosexual vago de raimbault, deben ser tan vagos como el, lo de las donaciones es una demagogia baratisima que ni siquiera es comprobable, lo del desarraigo de de maria ya salto, no se si se enteraron... y veo que nadie nego lo de hijos de la dictadura, son unos che guevara de carton prensado, aguante jeringa, deberia haber limpiado a muchos mas como ustedes, pavos...
ResponderBorrarNO EMPECEMOS A MARICONEAR, SI NO CORRESPONDE EL AUMENTO RAIMBAULT, SOLICITA QUE DE DESCUENTE POR LEGISLATURA, NO COMO DICE EN EL PUNTO 5 QUE LO DEPOSITARE, NO LO COBRE, PORQUE DESPUES DE LA TERMINAN GUARDANDO
ResponderBorrarAl que dijo que las donaciones ni siquiera son comprobables, lo siento por quien lo dijo, ya que evidencia la escasez de recursos (mentales) disponibles a su alcance para confirmarlas (algo muy sencillo de hacer). No te voy a decir cómo hacerlo, obviamente, ya que el esfuerzo debe ser tuyo... No te la haré fácil, pues la vagancia no es mi fuerte y no me gusta fomentarla en otros...
ResponderBorrarRespecto de la defensa de Raimbault, creo que no necesita defensores: su actuación como legislador es su mejor defensa, a mi entender.
Y la referencia sobre la homosexualidad de tal o cual persona, me parece que cuanto menos -no sé qué edad tendrá quien escribió el mensaje- algo deberías haber aprendido en estos años de vida: una persona es lo que es no solamente por lo que hace con su sexualidad y/o genitalidad. Y si todos esos fueron tus argumentos, tenés que aprender bastante todavía. Yo aún sigo aprendiendo.
Saludos.
PD: Si comprobás que algo de lo donado no es tal, hacé la denuncia ante la Justicia (con pruebas), convertite en un "denunciador compulsivo" y tendrás mis palabras de aliento para vos. Ojalá hubieran muchos más denunciadores compulsivos porque de esa manera, muchas cosas que están bajo la superficie saldrían a la luz.
COMO?NO FUERON UDS.LOS QUE SE OPUSIERON A QUE EL CONCEJO DELIBERANTE DE RIO GRANDE DIERA SUBSIDIOS PORQUE NO LES CORRESPONDIA HACERLO A LOS CONCEJALES? Y AHORA RESULTA QUE HACEN BENEFICENCIA CON LA LEGISLATURA ANDAAAA!!!!!!!! Y ADEMAS ESTA BIEN ESTO LOS HACE MEJORES QUE EL RESTO DE LOS LEGISLADORES....SON UNA TRUCHADA UDS. LOS DEL ARI IGUAL QUE LA GORDA ES, REHONESTA PERO NO EXPLICA COMO VERANEA EN MEXICO,EN MAR DEL PLATA Y DE AHI A PUNTA DEL ESTE,UN LABURANTE SEGURO QUE NO LO PUEDE HACER PORQUE VIVE DE SU SUELDO Y ELLA COMO HACE COMO DIPUTADA SI ES TAN HOESTA?MIERDA QUE LE RINDE EL SUELDO ....ANDAAAA VENDANLE A OTRO GIL ESTA TRUCHADA!!!!
ResponderBorrarAl defensor anonimo de Leg. RAIMBAULT, las donaciones que te referis son las que hace con la guita de la legilatura - Entonces la guita nuestra la dona el, porque de su bolsillo no saca un mango?
ResponderBorrarNo soy afiliado al ARI, soy independiente. Y si es cierto que el ARI se opuso a los subsidios, estoy completamente de acuerdo que esa haya sido su postura (tendría que haber sido la de todo el Concejo) porque no sé si sabés pero la mayoría de los subsidios que, habitualmente, se dan en política, terminan en los bolsillos de los políticos y sus familiares y no en el de quienes verdaderamente lo necesitan.
ResponderBorrarPor supuesto que las donaciones las hace con lo que percibe como legislador; en definitiva es su sueldo que todos pagamos y no veo nada mal que parte de su sueldo regrese al pueblo, ya sea a través de donaciones y lo que fuere. ¿Acaso te molesta eso? Mucho más debería molestarte que otros cobrando desarraigo ni siquiera se dignen a contribuir con la sociedad (no con los amigos) en algo; pero sí estén dispuestos a reírse en la cara en cuanta oportunidad tienen.
ResponderBorrarChau.
No hablo de lo que pueda donar el Leg. de su sueldo (porque como lo comprueba la sociedad, hablo de las donaciones con partida de la Legislatura - que en definitiva es guita del pueblo no?
ResponderBorrarTe corrijo algo: son partidas presupuestarias asignadas a cada bloque y como tal, cada bloque las asigna para lo que considere de su utilidad no teniendo la obligación de donar absolutamente nada. Lástima que esa utilidad la mayoría la usa en beneficio propio.
ResponderBorrarEl que sea una excepción me parece loable, entre tanto despilfarro.