Elecciones a directores de OSEF y Caja Previsional se hará con boleta electrónica

Elecciones a directores de OSEF y Caja Previsional, se hará con boleta electrónica, según confirmo el Juez Electoral

El juez Electoral, Isidoro Aramburu, confirmó que las elecciones del próximo 16 de noviembre donde los afiliados a la Caja de Previsión Social y a la Obra Social de la Provincia de Tierra del Fuego, elegirán a sus representantes en el directorio, se realizarán mediante la utilización de boletas electrónicas. 

Aramburu dijo que así se decidió en conjunto entre los organismos que serán los encargados de contratar el sistema. Al respecto señaló que se firmó “un convenio de deslinde de responsabilidades entre los dos organismos y el Juzgado Electoral, referentes a las obligaciones y responsabilidades que deben asumir”. 

En ese sentido aclaró que “nosotros tenemos la conducción del proceso electoral, cronograma, fiscalización y auditoría; y ellos se han comprometido a la contratación de servicios vinculados a el escrutinio provisorio y definitivo”. 

En ese sentido el magistrado dijo que los organismos “han optado por del CENTEC (Centro Tecnológico de Tierra del Fuego) para que provean esos servicios” y puntualizó que “la novedad es que se va contratar un servicio de boleta electrónica”. 

Aramburu se ocupó de aclarar que “esto no tiene que confundirse con el voto electrónico, ya que en este caso se trata de máquinas que solamente imprimen la boleta. Se trata de una máquina impresora estanca, funcionan con batería y no están enchufadas. Y tampoco están conectadas a ninguna red informática ni a internet”. 

En cuanto a la metodología de emisión del voto, el magistrado explicó que “el ciudadano concurren a la mesa, entrega su DNI, se le entrega una boleta en blanco, y el ciudadano va y la introduce en la máquina; aprieta el botón en la pantalla de su gusto electoral y eso se imprime en la boleta en blanco que previamente había colocado en la máquina”. 

También explicó que “una vez que la persona imprimió y verifica que es el voto deseado, dobla la boleta y se pega, porque no necesita sobre; vuelve a la mesa y lo introduce en la urna cumpliendo así con la emisión del voto”. “Esas boletas se van contabilizando y se va haciendo el escrutinio de mesa, y al final de la votación ya se tiene el número del escrutinio provisorio”, dijo Aramburú. 

Además aclaró que al día siguiente “el juzgado electoral procede a realizar el escrutinio definitivo que es el que tiene valor jurídico, contando los votos que están dentro de la urna y fiscalizado por los apoderados de las agrupaciones políticas”. 

“Es una tecnología novedosa y nosotros estamos más que satisfecho con ella”, sostuvo el magistrado, y recordó que los regímenes electorales habilitan “al juzgado electoral a incorporar tecnología y la ley 201 del sistema electoral político, nos regula de qué manera tenemos que hacer las elecciones. Mientras haya boletas que se impriman y que no induzcan a error estamos dentro del marco legal”, señaló. 

Como positivo, Aramburu dijo que con esta metodología “las agrupaciones no tienen que estar gastando recursos en imprimir las boletas previamente que debe ser del doble del padrón; y además ser consecuente cuando hablamos de preservar el medio ambiente, porque se está ahorrando una importante cantidad de papel”. 

Consideró que mediante el uso de este sistema “nos da transparencia, enorme cantidad de auditoría y confianza en los actores que están participando y de la ciudadanía y el electorado”. 

Por eso agregó y dijo estar “más que conforme con la decisión de la Caja y la Obra Social de contratar estos servicios”. “Obviamente hemos exigido y eso se va cumplir a rajatablas es que estas máquinas estén listas mucho antes de las elecciones y nosotros como juzgado, realizaremos una audiencia pública con los apoderados de las agrupaciones y dándole intervención a la prensa, puedan realizar todas las pruebas en las tres ciudades”, señaló. 

Por último, Aramburu dijo que otro requerimiento es que “nuestros profesionales del área de informática y obviamente el juzgado electoral, podamos tener acceso al código fuente y a la totalidad de la tecnología, para poder fiscalizar y garantizar absolutamente la transparencia y eficiencia de estas máquinas”.